Virgen de la Amargura
domingo, 24 de febrero de 2013
1ª Estación
Vía crucis de Gerardo Diego
Jesús sentenciado a muerte.
No bastan sudor, desvelo,
cáliz, corona, flagelo,
todo un pueblo a escarnecerte.
Condenan tu cuerpo inerte,
manso Jesús de mi olvido,
a que, abierto y exprimido,
derrame toda su esencia.
Y a tan cobarde sentencia
prestas en silencio oído.
Y soy yo mismo quien dicto
esa sentencia villana.
De mis propios labios mana
ese negro veredicto.
Yo me declaro convicto.
Yo te negué con Simón.
Te vendí y te hice traición
con Pilatos y con Judas.
Y aún mis culpas desanudas
y me brindas el perdón.
Via Crucis1ª Estación
Por la puerta de la Fuente
fueron saliendo los once.
En medio viene Jesús
abriendo un surco en la noche.
Aguas negras del Cedrón,
de su túnica recogen
espumas de luna blanca
batida en brisas de torres.
Jesús viene comprobando,
Pastor, sus ovejas nobles,
y se le nublan los ojos
al no poder contar doce.
«Pues la Escritura lo dice,
me negaréis esta noche.
Herido el Pastor, la grey
dispersa le desconoce.»
Entre los mantos, relámpagos
de dos espadas relumbran.
La luna afila sus hielos
en las piedras de las tumbas.
Ya las chumberas, las pitas
erizan sienes de agujas
y quisieran llorar sangre
por sus coronadas puntas.
Ya entraron al huerto donde
las aceitunas se estrujan,
Getsemaní de los óleos,
hoy almazara de angustias.
Ya Pedro, Juan y Santiago
bajo un olivo se agrupan,
como un día en el Tabor,
aunque hoy sin lumbre sus túnicas.
La noche sigue volando
--alas de palma y de juncia--
y, llena de sí, derrama
su triste látex la luna.
Se oye el rumor a lo lejos
de cortejos y cohortes.
Y el sueño pesa en los párpados
de los tres fieles mejores.
Jesús, solo, abandonado,
huérfano, pavesa, Hombre,
macera su corazón
en hiel de olvido y traiciones.
«Padre, apártame este cáliz.»
Sólo el silencio le oye.
La misma naturaleza
que le ve, no le conoce.
«Hágase tu voluntad.»
Y, aunque lleno hasta los bordes,
un corazón bebe y bebe
sin que nadie le conforte.
El sudor cuaja en diamantes
sus helados esplendores,
diamantes que son rubíes
cuando las venas se rompen.
Por fin, un Ángel desciende,
mensajero de dulzuras,
y con un lienzo de nube
la mustia cabeza enjuga.
Ya la luz de las antorchas
encharca en movibles fugas
y acuchilla de siniestras
sombras el huerto de luna.
Los discípulos despiertan.
Huye, ciega, la lechuza.
Y Jesús, lívido y manso,
se ofrece al beso de Judas.
sábado, 23 de febrero de 2013
Dame tu mano, María,
la de las tocas moradas.
Clávame tus siete espadas
en esta carne baldía.
Quiero ir contigo en la impía
tarde negra y amarilla.
Aquí en mi torpe mejilla
quiero ver si se retrata
esa lividez de plata,
esa lágrima que brilla.
la de las tocas moradas.
Clávame tus siete espadas
en esta carne baldía.
Quiero ir contigo en la impía
tarde negra y amarilla.
Aquí en mi torpe mejilla
quiero ver si se retrata
esa lividez de plata,
esa lágrima que brilla.
Déjame que te restañe
ese llanto cristalino,
y a la vera del camino
permite que te acompañe.
Deja que en lágrimas bañe
la orla negra de tu manto
a los pies del árbol santo
donde tu fruto se mustia.
Capitana de la angustia:
no quiero que sufras tanto.
ese llanto cristalino,
y a la vera del camino
permite que te acompañe.
Deja que en lágrimas bañe
la orla negra de tu manto
a los pies del árbol santo
donde tu fruto se mustia.
Capitana de la angustia:
no quiero que sufras tanto.
Qué lejos, Madre, la cuna
y tus gozos de Belén:
- No, mi Niño. No, no hay quien
de mis brazos te desuna.
Y rayos tibios de luna
entre las pajas de miel
le acariciaban la piel
sin despertarle. Qué larga
es la distancia y qué amarga
de Jesús muerto a Emmanuel.
y tus gozos de Belén:
- No, mi Niño. No, no hay quien
de mis brazos te desuna.
Y rayos tibios de luna
entre las pajas de miel
le acariciaban la piel
sin despertarle. Qué larga
es la distancia y qué amarga
de Jesús muerto a Emmanuel.
¿Dónde está ya el mediodía
luminoso en que Gabriel
desde el marco del dintel
te saludó: -Ave, María?
Virgen ya de la agonía,
tu Hijo es el que cruza ahí.
Déjame hacer junto a ti
ese augusto itinerario.
Para ir al monte Calvario,
cítame en Getsemaní.
luminoso en que Gabriel
desde el marco del dintel
te saludó: -Ave, María?
Virgen ya de la agonía,
tu Hijo es el que cruza ahí.
Déjame hacer junto a ti
ese augusto itinerario.
Para ir al monte Calvario,
cítame en Getsemaní.
A ti, doncella graciosa,
hoy maestra de dolores,
playa de los pecadores,
nido en que el alma reposa.
A ti, ofrezco, pulcra rosa,
las jornadas de esta vía.
A ti, Madre, a quien quería
cumplir mi humilde promesa.
A ti, celestial princesa,
Virgen sagrada María.
hoy maestra de dolores,
playa de los pecadores,
nido en que el alma reposa.
A ti, ofrezco, pulcra rosa,
las jornadas de esta vía.
A ti, Madre, a quien quería
cumplir mi humilde promesa.
A ti, celestial princesa,
Virgen sagrada María.
VIACRUCIS: OFRENDA
(Vecellio Ticiano y Gerardo Diego) |
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miércoles, 13 de febrero de 2013
Entramos en Tiempo de Cuaresma
Miércoles de Ceniza: el inicio de la Cuaresma | |||
13 de febrero 2013. La imposición de las cenizas nos recuerda que nuestra vida en la tierra es pasajera y que nuestra vida definitiva se encuentra en el Cielo | |||
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martes, 12 de febrero de 2013
sábado, 2 de febrero de 2013
Cartel Semana Santa Ferrol 2013
26/01/2013 Coordinadora Cofradias Ferrol;
El viernes día 1 de febrero a las 19:00 horas, se inaugura en la Sala de Exposiciones de la Autoridad Portuaria de Ferrol, la exposición de las catorce obras presentadas al I Certamen de Pintura " Pasión Cofrade 2012 ". En dicho acto se desvalará el nombre del ganador de dicho certamen. La obra ganadora será la que se utilice para la realización del Cartel anunciador de la Semana Santa Ferrolana 2013. En el mismo acto será presentado el cartel.
Y este es el cartel
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